Cómo captar el interés en una fotografía

Si observamos las grandes obras de aquellos fotógrafos a los que admiramos, siempre tienen “algo” que hace que no podamos dejar de mirarlas. Qué es eso que nos llama la atención?

 

Lo primero que debemos tener en cuenta es que, si bien, es posible captar imágenes llamativas sin pensarlas demasiado, por lo general aquello que tanto admiramos es fruto de un proceso de “maduración fotográfica”. Y dicho proceso incluye algunas características que permiten potenciar el factor atrayente de la fotografía en cuestión. Veamos algunos de ellos:

 

Lo diferente llama la atención. Ya sea que se trate de luz en medio de oscuridad, color en un entorno monocromático o pálido, o por el contrario, ausencia de color en un entorno colorido, el ojo siempre irá hacia aquello que genere contraste. Para hacer tomas atrayentes no podemos esperar a que esto se presente espontáneamente: en más de una ocasión tendremos que generar esas diferencias.

foco El buen uso de las líneas suma interés. Al fotografiar paisajes o estructuras será de vital importancia aprovechar las interesantes perspectivas que estos puedan aportarnos. En muchos casos todas las líneas convergen en un punto  conocido como "punto de fuga", y allí mismo irá nuestro ojo también. Así que lo mejor que podremos hacer es capturar este punto. Buscar perspectivas que brinden líneas diagonales o curvas en "S" también puede agregar interés a una fotografía sencilla.

perspectivaLos fondos "vacíos" o borrosos destacan. Sin importar que se trate de una persona o un objeto, un fondo vacío o desenfocado dejará al ojo sin opciones: irá hacia el protagonista de la fotografía.

zorro

Los ojos atraen al ojo. Tanto al fotografiar personas como animales, cuida que los ojos estén perfectamente enfocados. Y si utilizas algún programa de edición para mejorar detalles como la iluminación o la saturación de algún color de la fotografía en general, también podrás dar unos leves retoques – como realzar el brillo o mejorar las pupilas – que contribuyan a destacar esta parte del sujeto.

ojosPor otro lado, el análisis de las fotografías que te agradan, sumado a la práctica de ensayo y error harán que también generes tus propios recursos a la hora de llamar la atención, y eso obviamente contribuirá a que las fotos tomen un estilo propio.

Retratos: la importancia de los ojos

El nene de Wanda - Alberto Clavería

Un consejo fundamental a la hora de hacer retratos es el de enfocar a los ojos. Un retrato mediocre con los ojos bien enfocados siempre tiene posibilidades, pero un aparente buen retrato con los ojos desenfocados tiene todas las de perder.

 

Cómo miramos las fotos

La manera en la que recorremos con nuestra mirada una foto se rige por una serie de factores que dependen del contenido de cada foto en si. Es un proceso inconsciente que no podemos evitar, ya que nuestro ojo ha sido educado para ello.

Entre otros factores, nuestros ojos se mueven por una foto dirigiéndose a zonas con más luz (más claras) y zonas más enfocadas.

Otros elementos que afectan a la manera de recorrer una fotografía son las líneas, reales o imaginarias, que aparezcan en nuestra foto.

Los retratos y el poder de los ojos

Cuando se trata de retratos en los que salen rostros (si el retrato muestra solamente un detalle de la persona en la que no aparecen los ojos obviamente no tiene sentido esta explicación), nuestra mirada se centra inicialmente en los ojos.

Es un gesto inconsciente, intuitivo, basado probablemente en que las personas nos miramos a los ojos en el primer contacto visual aunque podamos retirar luego la mirada para detenernos en otras partes del cuerpo o desviar completamente la mirada.

Cuando un retrato tiene los ojos bien enfocados, la atracción de los ojos y la atracción de la zona enfocada de la foto generan una sinergia que hace que nos cueste apartar la mirada del retrato.

Si por el contrario, los ojos están desenfocados, inconscientemente buscaremos la zona enfocada de la foto mientras en nuestro cerebro se desencadena una batalla interior que hace que no nos decidamos entre dirigir la mirada a los ojos o a la zona enfocada, generando una sensación de incomodidad al contemplar la foto.

En entradas próximas vamos a ver cómo es factible con Photoshop y el manejo de luces y sombras resaltar las zonas de una foto para dirigir la atención a un punto determinado.

Conclusión:

Por último, salvo que estés haciendo algún tipo de retrato artístico en el que juegues con profundidades de campo mínimas y quieras resaltar alguna otra parte del rostro, recuerda que la regla número uno del retrato es que los ojos estén bien enfocados y tengan luz.