"Espero ansioso nuevos procesos y nuevos desarrollos. Creo que la imagen electrónica será el próximo gran avance. Estos sistemas tendrán características estructurales ineludibles, y tanto los artistas como los técnicos deberán hacer un renovado esfuerzo para comprenderlos y controlarlos". Ansel Adams,(1902-1984)
Cuando Ansel Adams escribió esas líneas para una de las revisiones de su libro "El Negativo", las computadoras no se habían integrado a la vida de la mayoría de las personas.
Sin embargo, existían algunos indicios de la gran revolución que se avecinaba en la fotografía y Adams intuyó con razón que ese desarrollo se aceleraría.
Cómo empezó todo
Muchos años antes, alrededor de 1940, Ansel Adams había desarrollado un sistema para controlar y pre-visualizar los valores tonales de una imagen en función de los materiales sensibles.
Su propuesta consiste en que el fotógrafo pueda imaginarse la foto terminada antes de tomarla, a partir de mediciones fotométricas parciales de las diferentes partes de la realidad a fotografiar. Luego, de acuerdo al tipo de negativo y su revelado, el fotógrafo puede visualizar en qué valor de gris -o Zona- quedará registrada cada parte de la imagen.
El planteo fue revolucionario, porque hasta ese momento la exposición se hacía de una manera más o menos general. A partir de entonces, los fotógrafos empezaron a tomar en cuenta cada uno de los valores de brillo de la escena y a analizar cual sería su rendimiento final en la película.
Con el paso de los años se desarrollaron muchas derivaciones del Sistema Zonal – que originalmente fue concebido para trabajar en B&N, de modo tal que los fotógrafos en color o los directores de fotografía de cine y video, empezaron a hablar de Zonas pese a no estar utilizando estrictamente el sistema de Adams.
Algunos especulan con la idea de que la formación de Adams como pianista lo condujeron a aplicar la idea de la notación musical, donde cada sonido tiene un lugar y una secuencia precisa, al campo de la fotografía.
Lo cierto es que desarrolló un amplio sistema que lleva a analizar la exposición en función de una escala y no de un punto fijo.
En el gráfico podemos apreciar cada una de las Zonas posibles en una imagen blanco y negro y su descripción, donde la Zona V es aquella sobre la cual basamos la exposición.
Exponer para las sombras y revelar para las luces, incluso en una escena de contraste normal, esta norma nos permite obtener unos negativos más ricos en detalles y mejorar el contraste.
El Sistema de Zonas es una teoría que se basa en un soporte (la película monocromática) que no tiene el mismo comportamiento que el sensor, por tanto la frase, Exponer para las sombras y revelar para las luces, ya no nos sirve para exponer correctamente en digital.
Veamos porqué:
Tomamos como ejemplo una cámara digital con un CCD a 12 bits (4096 niveles) y un rango dinámico de seis diafragmas, es decir, una cámara digital es capaz de registrar información entre sombras y luces en un intervalo de 6 diafragmas.
Realizamos dos capturas de la misma escena, una con una medición de la luz general de la escena y otra sobreexponiendo 2 puntos respecto a la medición puntual de las zonas más claras.
La escala de diafragmas se define mediante una progresión geométrica en la que cada diafragma deja pasar la mitad de luz que el anterior.
Esto quiere decir que en una captura digital la zona más brillante de la escena, las altas luces, estará representada por la mitad del total de niveles de la escena, mientras que en las sombras la información es mínima.
En el histograma de estas dos imágenes podemos apreciar como queda distribuida la información en función de cómo se ha expuesto. Al tratarse de una escena con dominio de las zonas claras, el valor de exposición que nos da el exposímetro de la cámara en modo matricial es demasiado corto para reproducir fielmente la intensidad de luz de la escena.
El resultado es una imagen ligeramente subexpuesta y, como se puede apreciar en el histograma, se pierde una enorme cantidad de información.
¿Por qué sucede esto?
La mayor cantidad de información en una captura digital se encuentra en las altas luces, el diafragma más brillante está representado por 2.048 niveles, si subexponemos un punto para asegurar el detalle en las luces y no reventarlas, lo que esta pasando en realidad es que perdemos la mitad de la información disponible, y empastamos las sombras más profundas, donde tenemos muy poca información.
Cuando disparamos en JPEG el problema es todavía mayor, ya que solo disponemos de 256 niveles para captar toda la gama de la escena, y en las sombras solo hay ente 4 y 8 niveles de información. Si subexponemos para salvar el detalle en las altas luces el resultado es todavía más desalentador.
Es muy importante señalar que la información que nos proporciona el histograma es siempre objetiva. Es conveniente analizar siempre nuestras imágenes mediante el histograma, y no fiarnos nunca ni de las pantallas LCD de la cámara ni de los monitores sin una calibración adecuada que permitan la visualización bajo parámetros objetivos.
El rango dinámico del sensor se define como la capacidad de captar detalle entre las sombras más profundas y las luces más altas. En el caso de las cámaras digitales de gama alta es del orden de 8 o 9 diafragmas, si tenemos en cuenta que la latitud de exposición de la película monocroma es de 7 diafragmas o zonas, la gama tonal que podemos conseguir con una cámara digital es considerablemente mayor que con la película monocromática tradicional.
Para obtener buenos resultados en digital debemos tener presente que el sensor de nuestra cámara digital es capaz de captar mucha más información en las luces que en las sombras, por tanto en fotografía digital podemos acuñar una nueva frase, Exponer para las luces.
En la práctica, una buena forma de asegurar que nuestras capturas tengan información en las altas luces es seleccionar dentro de la escena la zona más luminosa que queremos que tenga detalle, medir la luz de forma puntual y sobreexponer dos puntos respecto de la lectura del exposímetro. Tengamos en cuenta que este valor de dos puntos es sólo una referencia y puede variar dependiendo del tipo de sensor, a nosotros nos corresponde comprobar las prestaciones de nuestra cámara y conocer su rango dinámico para ajustar de forma precisa este valor.