11 Falsos Mitos de la Fotografía Digital

Seguramente han escuchado muchas veces estas afirmaciones, la mayoría son un mito, he aquí la explicación.

 

Todo se Puede Arreglar en Photoshop

Estamos acostumbrados a ver transformaciones mágicas de fotos al pasar por Photoshop. Pero la magia tiene límites. Si no has expuesto bien tu foto y has quemado una parte, Photoshop no se puede inventar la información que había ahí: se puede inventar otra, pero no esa. No pierdas la oportunidad de intentar realizar una mejor foto pensando que luego la puedes “arreglar” con Photoshop.

 

Cuanto Más Intensos los Colores, Mejor es la Foto

Una gran foto siempre cuenta una historia. Y esa historia puede estar cargada de alegría y diversión o impregnada de tristeza o melancolía. La gama de colores utilizada debe estar en función de la historia a contar y, en ese sentido, colores apagados, desaturados o fríos, pueden ser nuestros mejores aliados a la hora de transmitir la emoción que buscamos. No lo olvides: buscar siempre los colores más vívidos e intensos puede ser un vicio que deberías descartar cuanto antes.

 

Cuantos Más Detalles, Mejor es la Foto

La profundidad de campo es uno de los recursos más interesantes con que cuenta el fotógrafo para centrar la atención en su fotografía. Para realzar el primer plano, en ocasiones, nos interesa tener un fondo poco definido, sin detalles ni colores intensos. Cuando el ojo humano se enfrenta a una instantánea llena de detalles no sabe en qué centrarse ni decidir cuál es el elemento central de nuestra foto. Así que, en general, conviene decidir qué queremos mostrar en detalle y qué no.

 

No Se Pueden Hacer Buenas Fotos si no Tienes una Réflex

He podido ver fotos muy buenas realizadas con compactas muy económicas. Lo cual no quiere decir que no tengan sus limitaciones, ni que toda foto que se puede conseguir con una réflex se pueda realizar con una compacta. La clave de muchas grandes fotografías es la composición y en estos casos suele ser más decisivo un ojo bien educado que una cámara último modelo.

 

Sólo las Fotos que Cumplen las Reglas de la Composición pueden ser Buenas Fotos

Los grandes maestros del arte de la fotografía saben transgredir las normas y conseguir instantáneas espectaculares. Y es que, sencillamente, hay veces que la belleza no tiene patrones. Pero otras muchas sí, así que no desprecies el valor de conocer bien las reglas de composición y jugar a romperlas. Sobre todo, ten presente que no existen dogmas insuperables en fotografía.

 

Los Grandes Angulares Distorsionan las Fotos

Asegurar eso significa asegurar que el mundo es tal y como lo perciben nuestros ojos. Significa defender que toda forma distinta de ver es distorsionada. Resulta que el ojo humano medio tiene un ángulo de visión a lo ancho de 120 a 140 grados, mientras que los grandes angulares superan ampliamente esa cifra. Por tanto, las fotos realizadas con grandes angulares, muestran en una única captura espacios que nuestra vista no puede cubrir de golpe. O dicho de otro modo: si pudiéramos ver con un ancho de -digamos- 180 grados, lo que veríamos sería lo que un gran angular de unos 10mm captura.

 

La Máscara de Enfoque Conseguirá Arreglar Toda Foto Borrosa

Puedes experimentarlo por ti mismo. La máscara de enfoque en Photoshop sirve para acentuar el enfoque de una foto, no para crearlo allá donde no existe. Si una foto está trepidada o desenfocada Photoshop no puede hacer magia. Recuerda aquello de que Photoshop no puede inventarse la información que no está capturada.

 

Detrás de una Gran Cámara y una Óptica Impresionante Siempre hay un Gran Fotógrafo

El hábito no hace al monje. Si no te has fijado, te animo a que eches un vistazo. Es más frecuente de lo que uno pudiera pensar el ver cámaras impresionantes manipuladas por gente que, ni siquiera sabe cómo sujetarlas correctamente. Se trata, casi siempre, de gente con mucha pasta que piensa que las fotos las hace la cámara y no el fotógrafo. Así que, ya sabes, no te dejes impresionar.

 

Canon es Mejor que Nikon o Nikon es Mejor que Canon

Es una de las cuestiones más planteadas a lo largo y ancho de foros y blogs en la Red. ¿Qué es mejor Nikon o Canon? Yo preguntaría: ¿qué es mejor BMW o Mercedes? ¿Coca Cola o Pepsi? ¿Burger King o McDonald’s?… y probablemente se producirían encendidos debates también. Cuando, lo cierto es que tanto Nikon como Canon pueden ofrecernos excelentes modelos con los que disfrutar de nuestra afición. No vas a ser mejor fotógrafo por tener Nikon en lugar de Canon o al contrario. Así que, seguramente, esta cuestión no sea tan importante.

 

Cuantos Más Megapixels, Mejor es la Cámara

Este ha sido uno de los falsos mitos más arraigados y que, por fortuna, creo que se va descartando. Como probablemente sabrás ya, los megapixels sólo hablan de resolución, pero nada tienen que decir sobre fidelidad de colores, aberraciones ópticas, rango dinámico, ruido y un largo etc. Por otro lado, en los niveles de resolución que nos movemos hoy en día, las diferencias cada vez son menos significativas. Por poner un ejemplo: una cámara de 12 Mpxs permite obtener fotos tan solo un 9,5% más anchas y un 9% más altas (3:2) que una de 10 Mpx.

10 consejos para fotógrafos digitales

Muchas veces escuchamos los comentarios de las cámaras digitales pockets al querer hacer una foto donde el objeto está en movimiento. O me van a decir que nunca sacaron una foto de este tipo y el sujeto u objeto ya pasó!

Está claro que el problema es el retraso de obturación, el irritante tiempo que tardan la mayoría de las cámaras digitales en enfocar y calcular la exposición una vez pulsado el disparador, pero antes de capturar la imagen.

velocidadPero se preguntaron ¿si tampoco funciona el truco de disparar a medias? Que quiere decir esto?
Generalmente es posible evitar el retraso de obturación pulsando el disparador hasta la mitad de su recorrido antes de que comience la acción. De este modo, la cámara pre-enfoca, pre-calcula y adopta esos valores mientras continuemos pulsando el disparador a medias. Entonces, cuando el niño salta del trampolín, basta con pulsarlo a fondo para captar la imagen. Adiós a los retrasos.

 

 

A continuación les ofrezco 10 trucos que todos deberíamos conocer:

1. Basta de retrasos de obturación. Si su cámara presenta problemas de retraso de obturación, será mejor que pruebe el truco del pre-enfoque. Otra opción: muchas cámaras ofrecen una función de enfoque contínuo, que consume más batería, pero también disminuye el retraso de obturación al ir enfocando constantemente mientras encuadramos (o mientras el sujeto se desplaza).

Las cámaras más nuevas y caras tienden a sufrir menos retraso de obturación, y los modelos réflex digitales (es decir, las cámaras de unos 1.000 € con objetivos intercambiables) no presentan ningún retraso.


2. No te creas el mito de los megapíxels
. Una mayor cantidad de megapíxels no hace que una cámara sea mejor.
Los megapíxels indican el tamaño máximo de cada foto. Por ejemplo, una cámara de cuatro megapíxels captura imágenes compuestas por cuatro millones de puntos diminutos. El problema es que los fabricantes de cámaras presumen de su cantidad de megapíxels como si fueran un indicador de la calidad fotográfica, y hay muchos consumidores que acaban picando.

En realidad, el número de megapíxels es un indicador del tamaño, pero no de la calidad. Hay fotos horribles de siete megapíxels, como también las hay espléndidas de sólo tres megapíxels. La calidad del objetivo y del sensor determinan mucho más los resultados fotográficos; es una lástima que no existan estadísticas fáciles de comparar sobre dichos atributos).

Entretanto, más megapíxels obligan a comprar una tarjeta de memoria más grande y cara para guardarlos. Y también a esperar mucho más: entre foto y foto, durante la transferencia al ordenador, y para abrir y editar las fotos.

Sólo hay dos situaciones  en las que conviene tener en cuenta los megapíxels: cuando se quieren hacer ampliaciones de gran formato (por ejemplo, pósters de 50 x 75 cm) y cuando se desea contar con libertad para recortar gran parte de una foto para conservar el encuadre bueno de verdad, dejando aún los píxels suficientes para imprimir copias de tamaño razonable.

Pero si  no vas a editar sus fotos ni necesita ampliarlas mucho, no se deje llevar por la tendencia hacia los megapíxels. Un buen punto de equilibrio se encuentra en los 4 ó 5 megapíxels.

(Otro truco, éste de regalo: las fotos que se van a mirar en una pantalla, ya sea la web, el correo-e o un pase de diapositivas) no necesitan muchos píxels para nada. Probablemente, con dos megapíxels hay más que de sobra para llenar una pantalla de ordenador sin tener que abrir el zoom. Las grandes cantidades de megapíxels tienen que ver sobre todo con la impresión, que requiere una densidad de puntos mucho mayor).


3. Ignora el zoom digital
. Otro de los argumentos que utilizan los fabricantes de cámaras para llegarnos a la billetera es presumir de dos factores de zoom distintos: el óptico (normalmente, 3 aumentos) y el digital (¡10 aumentos! ¡20 aumentos! ¡30 aumentos!).

El zoom digital no es más que una ampliación de la foto. No le aproxima a la acción ni capta más detalles; de hecho, los valores más elevados pueden llegar a estropear las fotos. Para obtener los mejores resultados, deja desactivado el zoom digital. Lo que importa es el número del zoom óptico, que es el del objetivo que le aproxima al sujeto.


4. Tira la tarjeta incluida
. Por desgracia, es práctica habitual incluir con la cámara una tarjeta de memoria de muy poca capacidad: un cebo con el que podrá usted disparar un par de fotos mientras todavía está bajo el árbol de Navidad, pero que se llena con sólo cuatro o cinco fotos.

Por eso, al elegir cámara, hay que contar con el coste de una tarjeta de memoria de capacidad razonable, pongamos 512 MB.


5. Atención al formato
. Hay una variedad inmensa de tamaños y formas de tarjetas de memoria. Los formatos más económicos son el Compact Flash [3] (grande y robusto; la tarjeta de 1 GB cuesta unos 90 €, pero las hay de hasta 8 GB de capacidad) y el SD [4] (unos 100 € por la tarjeta de 1 GB; el máximo son 2 GB).

La mayoría de las cámaras Olympus y Fuji necesitan tarjetas xD [5] (unos 120 € la tarjeta de 1 GB, la de más capacidad), mientras que la mayoría de los modelos Sony utilizan el Memory Stick [6] Pro (unos 160 € la tarjeta de 1 GB, hasta un máximo de 4 GB) o bien el Memory Stick Duo, de menor tamaño (unos 200 € la de 1 GB; el máximo son 2 GB).

Ten en cuenta que hay ordenadores portátiles, de bolsillo, teléfonos móviles, consolas de videojuegos, impresoras, quioscos de impresión fotográfica y otros equipos provistos de ranuras para tarjetas de memoria. Lo más frecuente es que admitan tarjetas Compact Flash o SD. Las ranuras compatibles con Memory Stick son menos habituales, y las ranuras XD una rareza.


6. Investiga
. Por fortuna para los compradores potenciales de cámaras, la web está repleta de sitios, como Dpreview, que prueban y analizan a fondo todos los modelos que se les ponen a tiro. Consúltalos antes de comprar; si tienes apuro, lee por lo menos la introducción y las conclusiones, y mira las fotografías de muestra.

7. Identifícate. No se te ocurra preguntar “¿Qué cámara digital me compro?” a un columnista de tecnología. Sería lo mismo que preguntar “¿Qué coche debo comprar?” o “¿Con quién tengo que casarme?” No existe una única respuesta correcta.
Ahora existen cámaras de diversas categorías, cada una con sus ventajas e inconvenientes. Hay cámaras tan pequeñas como una tarjeta de crédito y de sólo dos centímetros de grueso (llamativas y muy cómodas, pero con pocos controles manuales y poca duración de la batería); cámaras que caben en el bolsillo del abrigo (mayores que las anteriores, pero todavía compactas, con tapa de objetivo incorporada, batería de mayor duración y más funciones); modelos semiprofesionales con zoom (ya no caben en el bolsillo, pero llevan objetivos con super-zoom); y modelos réflex (baterías de larga duración, sin retraso de obturación y unas fotos extraordinarias).


8. Apaga el flash
. El flash de una cámara digital típica tiene un alcance de menos de tres metros. En otras palabras, lo único que conseguirás con él en la obra de teatro de fin de curso es distraer a los actores.

9. Enciende el flash. Por otro lado, hay un buen truco para cuando el rostro de alguien queda en penumbra: encender manualmente el flash. El flash forzado o de relleno rescata de las sombras el rostro del sujeto y salva más de un retrato que de otro modo quedaría reducido a silueta. (En la mayoría de las cámaras, el flash se enciende y apaga pulsando el botón con el “rayito”).


10. Apaga el display
. El display es, sin duda, una de las gracias de la fotografía digital, pero también la principal consumidora de la energía de la batería. Si no te molesta sujetar la cámara frente a los ojos y mirar por el visor óptico, apaga la pantalla cuando haga fotos y duplicará la duración de cada recarga de batería, si la cámara tiene ahorro de energía, actívalo!

Éstos son los 10 hábitos del fotógrafo digital eficaz.